Calle Tomás Conde

Ver:

• Casas de las Pavas.
• Palacio de Vega Armijo.

Recorrido:

La calle Tomás Conde parte de la Plaza de Maimónides y desemboca en el Campo Santo de los Mártires. Confluyen tres callejas: a la derecha, la de la Luna y a la izquierda dos sin salida, el callejón del Escudo y el Callejón del Arco.

Descripción:

Debe el nombre a Tomás Conde y Luque, alcalde de la ciudad entre el 1875 y 1877, que vivió en la que fue casa solariega de los Sigler de Espinosa de esta calle, que conserva encima del balcón el escudo de armas con dos pavos reales a los lados por lo que popularmente, convirtiéndolos en hembras, se le dio el nombre de calle de las Pavas. Entre sus obras están la apertura de la Calle Claudio Marcelo, los Jardines de la Victoria y los jardines del Campo de la Merced. También se le ha conocido como Calle de los Marqueses de Vega Armijo. Al final de la calle, próximo al Campo Santo de los Mártires hay una calle sin salida conocida por el Callejón del Arco por uno que tiene a la entrada.

Casa de las Pavas. Como ya se ha dicho, el nº 10 de la calle Tomás Conde es la casa solariega de los Sigler de Espinosa del siglo XVI. Tiene portada renacentista con dos cuerpos adintelados con escudo de los Sigler de Espinosa, flanqueado por dos pavos reales. En la actualidad es el Hotel Boutique Las Casas de la Judería, formado por la unión de varias casas, siendo La Casa de la Pavas, la principal. Ha pertenecido a destacados personajes cordobeses como los Fernández de Córdoba, Sigler de Espinosa, o don Francisco de Argote, racionero de la catedral de Córdoba, hermano de la madre del poeta Don Luis de Góngora y Argote, que nació en esta casa. Durante la rehabilitación se han encontrado restos arqueológicos como solería de ladrillo, columnas ochavadas de estilo mudéjar, silos, etc. que se han conservado.

Muy próxima, en el nº 11 está la Casa de los Marqueses de la Motilla, solariega del siglos XVI y reformada en el XX. El patio principal tiene galería de dos plantas, la inferior con arcos de medio punto de ladrillo con las enjutas y los espacios del muro entre arcos  decorados con cerámica sevillana. La planta superior, muy modificada, tiene los vanos de los arcos cegados con muros en los que se abren balcones.

Palacio del Marqués Vega Armijo. En el nº 8 de la calle, era la casa solariega de los Mecías de la Cerda, oriundos de uno de los conquistadores de Córdoba, contando entre sus individuos hombres muy notables, tanto en las armas como en las letras. Uno de estos señores, don Fernando Mecía de la Cerda, obtuvo el marquesado en 1695 por gracia de Carlos IV. Originariamente la casa se adosaba a la muralla por la que tenía un acceso, que actualmente es el Portillo de la Luna. Tiene la portada flanqueada por pilastras y curvada de piedra sobre la que existe un balcón también curvo. Sobre la puerta se sitúa el escudo de los Mecía de la Cerda. En su interior conserva una estancia con artesonado mudéjar.  

Al final de la calle con fachada al Campo Santo de los Mártires está el Restaurante Almudaina ubicado en un palacete del siglo XVI construido por Leopoldo de Austria, obispo de Córdoba y tío del Emperador Carlos V. Tiene portada adintelada renacentista sobre la que se abre una ventana con reja volada rematada por frontón curvo que acoge el escudo de los Señores del Corral. Tiene un patio interior con suelo de chino, paredes cubiertas de hiedra y cubierto por una bella vidriera emplomada que deja paso a la luz natural. Los comedores tienen el techo con vigas de madera y el llamado Mihrab está cubierto por un artesonado mudéjar.